La integración productiva en la industria automotriz de Norteamérica continuará siendo una prioridad para el sector, incluso frente a las presiones comerciales en Estados Unidos en el contexto de la próxima revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC), señaló José Rogelio Garza, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
Garza destacó que el sector automotriz, responsable de cerca del 4% del Producto Interno Bruto nacional, buscará mantener condiciones comerciales competitivas, incluyendo la eliminación de aranceles, con el objetivo de conservar su posición frente a otras regiones del mundo.
Actualmente persiste un arancel del 25% para ciertas operaciones, recordó Garza, quien afirmó que la industria continuará solicitando un esquema de libre acceso al mercado para garantizar su crecimiento, tal como ha ocurrido durante los últimos 30 años.
El representante industrial subrayó que, pese a las tensiones externas, el sector está preparado para defender reglas de origen, promover la eliminación de aranceles y mantener la integración productiva que ha dado forma a la cadena de valor regional.
Actualmente, la industria automotriz mexicana exporta más de 3.5 millones de vehículos anualmente, de los cuales alrededor de 2.85 millones se destinan al mercado estadounidense. “Por eso la relevancia del mercado norteamericano”, afirmó.
Entre enero y noviembre, la actividad del sector se mantuvo relativamente estable respecto al año anterior, con variaciones marginales: una disminución de 1.5% en producción, 1.6% en exportaciones y un incremento de 1% en el mercado interno.
Garza también destacó el nivel de integración entre los tres países al mencionar que algunos componentes cruzan las fronteras hasta siete veces antes de convertirse en producto final. “Esta industria no puede funcionar de manera aislada”, indicó, al enfatizar que la complementariedad entre México, Estados Unidos y Canadá ha sido clave en su desarrollo.
Actualmente, América del Norte produce cerca de 17 millones de vehículos al año, mientras que China fabrica más de 31 millones. Ante ello, Garza afirmó que fortalecer la colaboración regional es necesario para mantener competitividad global.
El presidente de la AMIA recordó que Estados Unidos ya inició consultas sobre la aplicación de reglas de origen en el sector, mientras que México avanza en ajustes internos, como la propuesta para aplicar aranceles a vehículos importados con el fin de fortalecer la producción nacional.
Garza señaló que la industria ve con buenos ojos esta iniciativa orientada a equilibrar condiciones de competencia.
Finalmente, destacó el impacto económico del sector en México, donde se fabrican aproximadamente 11,000 vehículos diarios, movilizando alrededor de 1,000 camiones por día, además de miles de toneladas de autopartes.
A pesar de los desafíos políticos y comerciales, Garza aseguró que existe consenso entre las industrias automotrices de Estados Unidos y Canadá respecto a la importancia de preservar el TMEC como marco de integración regional.
Fuente: Forbes México



